Los últimos tres meses estuve dando vueltas por Latinoamérica (no llegue a México porque me niego a conseguir una visa para pasar por Miami) es interesante ver como las percepciones sobre Bolivia de la gente afuera varían de manera ENORME no sólo entre países sino entre zonas o personas.......quizá la expresión más extrema del optimismo es la de ver nuestro país como el de las utopías.
Y pensando en el origen de la palabrita me acordé del libro del mismo nombre y copio a Thomas Moore cuando dice:
"Contaba complacido cómo en diversas ocasiones había visto a más de veinte colgados de una misma cruz. No salía de su asombro al observar que siendo tan pocos los que superaban tan atroz prueba, fueran tantos los que por todas partes seguían robando.
-No debes extrañarle de ello -me atreví a contestarle delante del Cardenal-: semejante castigo infligido a los ladrones ni es justo ni útil. Es desproporcionadamente cruel como castigo de los robos e ineficaz como remedio. Un robo no es un crimen merecedor de la pena capital. Ni hay castigo tan horrible que prive de robar a quien tiene que comer y vestirse y no halla otro medio de conseguir su sustento. No parece sino que en esto, tanto en Inglaterra como en otros países, imitáis a los malos pedagogos: prefieren azotar a educar. Se promulgan penas terribles y horrendos suplicios contra los ladrones, cuando en realidad lo que habría que hacer es arbitrar medios de vida. ¿No sería mejor que nadie se viera en la necesidad de robar...."
Y ahora volviendo al país uno se encuentra con ideas policiales para hacer mas dura la prisión preventiva y continuar saturando las cárceles de gente que sin condena formal sufre un castigo inhumano, y uno se pregunta lo mismo no será mejor que trabajemos en el problema de fondo antes de seguir mintiéndonos pensando que la cárcel soluciona algo?
Y pensando en el origen de la palabrita me acordé del libro del mismo nombre y copio a Thomas Moore cuando dice:
"Contaba complacido cómo en diversas ocasiones había visto a más de veinte colgados de una misma cruz. No salía de su asombro al observar que siendo tan pocos los que superaban tan atroz prueba, fueran tantos los que por todas partes seguían robando.
-No debes extrañarle de ello -me atreví a contestarle delante del Cardenal-: semejante castigo infligido a los ladrones ni es justo ni útil. Es desproporcionadamente cruel como castigo de los robos e ineficaz como remedio. Un robo no es un crimen merecedor de la pena capital. Ni hay castigo tan horrible que prive de robar a quien tiene que comer y vestirse y no halla otro medio de conseguir su sustento. No parece sino que en esto, tanto en Inglaterra como en otros países, imitáis a los malos pedagogos: prefieren azotar a educar. Se promulgan penas terribles y horrendos suplicios contra los ladrones, cuando en realidad lo que habría que hacer es arbitrar medios de vida. ¿No sería mejor que nadie se viera en la necesidad de robar...."
Y ahora volviendo al país uno se encuentra con ideas policiales para hacer mas dura la prisión preventiva y continuar saturando las cárceles de gente que sin condena formal sufre un castigo inhumano, y uno se pregunta lo mismo no será mejor que trabajemos en el problema de fondo antes de seguir mintiéndonos pensando que la cárcel soluciona algo?
Comentarios
Soy litigante en temas comerciales y cuando litigo asuntos penales el 99% de las veces soy defensor.