Durante el último mes apenas dormí unos tres días en mi departamento.
Espero volver mañana a mi ciudad pues tengo que contar a los amigos como me fue en Guayaquil, tengo además un montón de trabajo atrasado y mi proyecto de sacar gente de la cárcel estuvo andando sin mi (para los autoritarios que disfrutan viendo a sus projimos enjaulados seguro que eso no suena muy bien).
En San José (Costa Rica) el discurso de la inseguridad -como en Santa Cruz (Bolivia)- toma como ejemplo el caso de una muerte por un robo de celular. Puede ser una coincidencia.
El hecho es que no puede negarse la inseguridad. Pero tampoco puede obviarse que el discurso de inseguridad -en ocasiones- es empleado para limitar la libertad de la población.
Un ejemplo se dio este fin de semana en Ecuador. El Presidente Correa, alegando razones de seguridad de la población, declaró un estado de excepción y mandó a los militares a las calles. Esto de manera coincidente con un paro de maestros y cortes de rutas protagonizados por indígenas en medio de una discusión sobre la aprobación de una nueva legislación del agua. Puede ser una coincidencia.
La seguridad es un tema serio, lo suficientemente serio como para no politizarlo o como para evitar titulares que ya son repetitivos en nuestros países. A veces las coincidencias toman forma de patrones o estructuras cuando vemos más allá de nuestro caparazón.
Espero volver mañana a mi ciudad pues tengo que contar a los amigos como me fue en Guayaquil, tengo además un montón de trabajo atrasado y mi proyecto de sacar gente de la cárcel estuvo andando sin mi (para los autoritarios que disfrutan viendo a sus projimos enjaulados seguro que eso no suena muy bien).
En San José (Costa Rica) el discurso de la inseguridad -como en Santa Cruz (Bolivia)- toma como ejemplo el caso de una muerte por un robo de celular. Puede ser una coincidencia.
El hecho es que no puede negarse la inseguridad. Pero tampoco puede obviarse que el discurso de inseguridad -en ocasiones- es empleado para limitar la libertad de la población.
Un ejemplo se dio este fin de semana en Ecuador. El Presidente Correa, alegando razones de seguridad de la población, declaró un estado de excepción y mandó a los militares a las calles. Esto de manera coincidente con un paro de maestros y cortes de rutas protagonizados por indígenas en medio de una discusión sobre la aprobación de una nueva legislación del agua. Puede ser una coincidencia.
La seguridad es un tema serio, lo suficientemente serio como para no politizarlo o como para evitar titulares que ya son repetitivos en nuestros países. A veces las coincidencias toman forma de patrones o estructuras cuando vemos más allá de nuestro caparazón.
Comentarios
"Os han dado a elegir entre la indignidad y la guerra; habéis elegido la indignidad, pero tendréis también la guerra". Winston Churchill
Saludos...
saludos